PARÓN POR CELULITIS

Ainssssssssssssssssssssssssssss, Dios mío, que no he estado de vacaciones, que no. He estado un poco (tan sólo un poco) retirada del mundanal ruido, emulando a Fray Luis de León. Tenía mucho que leer, y tengo mucho que leer (shulo el libro de la comunera de Castilla), mucho que pensar (que sí, que pienso, existo y doy por culito de vez en cuando) y además, tenía roto el internetetetete de los cojo.... Y para colmo, inri y demás pesadillas, me pongo mi bikini nuevo (mu bonito, de verdad) y me veo la celulitis, horrrrrrrrrror, con lo cuál me retiro al campo, a ver si con los olivos como única visión se me pasa la mala leche que me entra todos los veranos. Todavía recuerdo como era yo hace unos años, los modelitos que me gastaba, ahora los niños me dicen señora, y los adultos me dicen que soy una tía inteligente (algo es algo). La semana pasada me dijeron que si yo fuera al programa ese de listos y guapos, sería de las listas, o sea, más claro H2O. En finnnnnnnnnnsssss, que retomo a la acción porque de vacaciones me voy en septiembre, y todavía nos queda un poco de veranito. Por lo pronto, entre lectura y lectura, me leo cositas feministas de esas shuuuuuuulas. Nenas ¿habéis leído Las chicas buenas van al cielo y las malas a todas partes? A mí, que lo estoy releyendo me reafirma en mi faceta de mala. Besitos violetas, y que no, que no me quito de enmedio (para pena de esos y esas que ya sabemos.... ayyyy! que triste es estar sin el sillón, yo a lo mejor me pido uno para Reyes, quien sabe)